Es conocido por todos que los policías y otras personas que están en cuerpos de seguridad utilizan chalecos antibalas para "salvar" sus vidas en caso de que una bala les impacte en la zona que este protege (mayormente el tronco), pues bien, también es sabido que están desarrollando nuevas maneras de llevar esa protección a otras zonas del cuerpo, como por ejemplo ¿los dientes?
También es sabido que hay historias de personas que al ser impactadas por balas, no murieron porque estas dieron en otro lugar; que si el celular, una biblia, una placa, etc.
Esta es la introducción perfecta para esta historia; resulta que un señor de 81 años en España salvó su vida cuando fueron a robar su bar y el atacante (siendo ya lo suficientemente cobarde) decidió que lo mejor era asesinar al anciano, con tan mala puntería (y suerte para el señor) que la bala dió en la boca, siendo parcialmente detenida por la dentadura postiza de la victima. Lo malo de todo esto es que la bala quedó alojada en la garganta, pero por su avanzada edad es delicada su extracción.
Buscando un poco de humor en esta noticia... vale la pena averiguar la marca de esta dentadura ¿eh?
