Conoce algunos riesgos de usar faja

Estamos seguros que muchas de las mujeres que nos leen han utilizado alguna vez una faja; o muy probablemente conocen a alguien que si. Es cierto que estéticamente y médicamente (más por la primera) se ha convertido en un instrumento muy útil.

No vamos a ir en contra del uso de la faja, pero si queremos dejarles algunos de los CONTRA de utilizar muy seguido este distinguido "tapa rollitos"

Utilizar faja puede comprimirte los órganos como el estómago e intestinos, incluso puede provocar reflujo, acidez y que digieras más lento las comidas.

Te puede ocasionar dolores de piernas, porque comprimes las venas y por ende limitas la circulación de sangre. Esto puede presentarse con sensación de hormigueo o incluso en pérdida de sensibilidad.

Uno de los beneficios de la faja, como ayudarte a mantener una buena postura, puede ser uno de los riesgos de usarla, esto porque tu cuerpo mantiene su posición gracias a la ayuda de la faja y no al uso de tus músculos, lo que hace que estos e debiliten.

¿Para qué negarlo?, si usas faja constantemente es probable que al quitártela tengas algunas áreas enrojecidas y sudadas, pues bien, te comentamos que es un caldo de cultivo ideal para las bacterias y las infecciones.

Si no te sirve la faja NO la compres, busca una adecuada a tu talla y que apriete lo justo y saludablemente necesario, estar muy apretada puede producir que sientas asfixia.

¿La solución?, no uses la faja a diario, si lo haces ocasionalmente no tendrás problemas.